En el fuego de la cocina calenté un ladrillo
lo llevé a la cama, del lado
donde yo no duermo
le dije: amor mío
cuánto te parecés al anterior
la misma mudez, la misma
carencia de ideas,
el mismo virgen corazón
de no haber sentido, nunca,
nada
Elena Anníbali.
lo llevé a la cama, del lado
donde yo no duermo
le dije: amor mío
cuánto te parecés al anterior
la misma mudez, la misma
carencia de ideas,
el mismo virgen corazón
de no haber sentido, nunca,
nada
Elena Anníbali.