No me relaciono con el desastre
ni con la muerte.
Soy un as-pájaro que come vida
adaptado a diámetros de luna y sol.
Una mujer pacífica en un mundo de batallas.
Hay tanta cólera en la mente de los hombres
¿Cuándo van a comprender que hay
un camino distinto
para poder llegar a los grandes poderes?
Porque
¿qué cosa duradera redime la violencia?
¿Qué es lo que la sangre lava para siempre?
Si todo queda realmente negro
bajo una costra de tristeza.
Nuestro espíritu no esta hecho para matar
y a veces mata
en el nombre moderno de Dios
que es el Dios de las excusas.
¡Cómo quisiera que esta humanidad no sea
una flor de música destinada a quemarse!
Cómo olvidar las tradiciones, los dráculas
las artes-trampas que dirigen la decapitación
desaparecen ciudades o gobiernan las almas
introduciendo microbios que carcomen
la alegría de vivir.
De suerte que estos errores invaden un siglo
confunden los pueblos y alteran
el movimiento del corazón del hombre.
Hemos olvidado lo grandioso que somos.
Mi poesía siente frío en este mundo
donde no me relaciono con la especie.
…Y mientras ellos caen yo resisto…
Raquel Jodorowsky (Chile, 1927 - Perú 2011)